CUIDADO DE LESIONES EN CASA

Cuando se presenta dolor muscular por una sobrecarga o lesión, debes descansar la parte afectada. Aplica hielo dentro de las primeras 24 a 72 horas para reducir la inflamación y el dolor. Después aplicar calor de forma más habitual.

Los dolores musculares suelen responder bien a los masajes y los ejercicios de estiramiento suaves después de un descanso largo también son útiles.

El ejercicio regular puede ayudar a recuperar el tono muscular. Caminar, montar en bicicleta y nadar son buenas actividades que se pueden intentar. Uno de nuestros fisioterapeutas puede enseñarte algunos ejercicios de estiramiento para ayudar a mejorar y que no sientas dolor.

Evita o adapta las actividades de alto impacto y el levantamiento de peso cuando estés lesionado o mientas notes dolor.

Asegúrate de dormir bien y trata de reducir el estrés. El yoga y la meditación son formas excelentes para ayudarte.

Estos son algunos pasos que pueden ayudar a disminuir el riesgo de tener dolores musculares:

  • Estírate antes y después de hacer ejercicio.
  • Calienta antes del ejercicio y permite que los músculos se enfríen después de la actividad.
  • Bebe mucha agua antes, durante y después del ejercicio.
  • Si trabajas en la misma posición la mayor parte del día, como estar sentado delante del ordenador, estírate al menos cada hora.

Si las medidas caseras no funcionan o tienes alguna consulta, acude a Sannus Clinic y nosotros nos encargamos de darte las pautas necesarias para recuperarte.

ADAPTAR LA RUTINA AL VERANO

El calor y las altas temperaturas pueden perjudicar nuestra salud en esta época del año.

Por eso, es importante saber adaptar nuestras rutinas a las nuevas necesidades climáticas características de este tiempo.

 

Por eso, te damos las claves para seguir con el deporte y los ejercicios de nuestra rutina de forma segura.

 

Elige el momento adecuado

Elegir el momento del día donde las temperaturas son más bajas o más suaves, evita hacer ejercicio en las horas más calurosas del día. Las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde son las ideales para hacer ejercicio al aire libre.

 

Mantente hidratado

Si durante el año es muy importante esta parte, imagínate en verano. Asegúrate de llevar siempre contigo una botella de agua fresca. Si sudas mucho puedes incluso añadir bebidas isotónicas para reponer electrolitos.

 

Adapta la ropa

Usa ropa ligera, transpirable y de colores claros. La ropa oscura absorbe más calor, lo que puede aumentar tu temperatura corporal. Además, podemos añadir complementos como las gorras y los sombreros que nos protegen del sol.

 

Busca lugares frescos

Es importante escoger un lugar fresco para hacer ejercicio, un parque arbolado o incluso la piscina. En caso de que no tengas acceso a un lugar con sombra para hacer ejercicio, recuerda hacer pausas para descansar y para que tu cuerpo no sufra por exceso de calor.

 

Adapta tu rutina

Por último, pero no por eso menos importante, adaptar la rutina de ejercicios a la época del año en la que nos encontramos. Si usas la bicicleta para ir al trabajo, intenta hacerlo a un ritmo más bajo para no sudar tanto. Si, por el contrario, practicas un deporte de alto impacto como el running, puedes cambiarlo por la natación, que tiene menos impacto y es menos invasivo para las articulaciones.

 

En Sannus Clinic nos preocupamos por tu salud y tu seguridad, si tienes cualquier duda puedes ponerte en contacto con nosotros y te asesoramos sin compromiso.